Un inversor de corriente, también llamado inversor de voltaje o convertidor, es un dispositivo electrónico que transforma Corriente Continua en Corriente Alterna.
Además de cambiar el tipo de corriente, los inversores también modifican el voltaje (tensión eléctrica), de forma que el voltaje de entrada y el voltaje de salida son diferentes, por eso también se conocen como inversores de voltaje.
A continuación veremos como funcionan los inversores de corriente, los diferentes tipos que hay y para qué se utilizan.
Índice de contenido
¿Cómo funciona un inversor de corriente?
El voltaje en la corriente continua es constante y la carga eléctrica fluye en una sola dirección. Por el contrario, en la corriente alterna la magnitud y dirección de flujo cambia de forma periódica con valles y picos que aparecen a intervalos regulares.
El inversor de corriente utiliza circuitos electrónicos para hacer que el flujo de la corriente continua cambie de dirección de forma periódica transformándola en corriente alterna.
El inversor además emplea una serie de filtros para hacer que estos cambios de dirección sean suaves y regulares para que puedan ser utilizados en los dispositivos electrónicos domésticos.
La mayoría de dispositivos electrónicos necesitan suministro de corriente alterna para funcionar correctamente ya que, por lo general, son fabricados para ser conectados a la red eléctrica doméstica, la cual es de corriente alterna.
Sin embargo, estos aparatos necesitan que la electricidad que reciben tenga un voltaje específico, continuo y bien regulado.
El voltaje de la corriente alterna es mucho más fácil de regular que la corriente continua, por eso es frecuente que los aparatos electrónicos dispongan de inversores de corriente, por ejemplo en las fuentes de alimentación del PC, que regula la corriente alterna hasta cumplir las especificaciones del aparato y luego la convierte en corriente continua para lograr un suministro de intensidad constante.
Capacidad de los inversores de voltaje
La capacidad de los inversores de voltaje se mide como la cantidad total de vatios (o wattios) que pueden suministrar.
Como normal general, se debe elegir un inversor cuya capacidad sea igual al total de vatios requeridos por cada uno de los aparatos que se le van a conectar más un 50% más para que pueda soportar posibles picos de consumo.
Por ejemplo, si vamos a conectar un DVD y una nevera portátil, y cada uno necesita 100 W, el inversor que utilicemos debería tener una capacidad mínima de 300 W (100 + 100 = 200; 500 + 50% = 300).
Siempre es conveniente adquirir un inversor con más capacidad de la que vayamos a necesitar de inmediato para que podamos conectar más aparatos en un futuro sin así lo necesitamos sin tener que comprar uno nuevo.
Tipos de inversores
La mayoría de inversores de voltaje o de corriente actuales pueden producir corriente alterna de onda cuadrada (onda sinusoidal modificada) o de onda sinusoidal pura.
La corriente continua de onda cuadrada no tiene unos picos y valles de forma tan suave como la corriente alterna que hay en la red eléctrica de los hogares, pero es válida para la mayoría de aparatos eléctricos. Debido a que se pueden utilizar y que son muy baratos, los inversores de onda cuadrada con las comunes.
Los inversores de onda sinusoidal pura son bastante más caros pero producen una corriente alterna más constante y con picos y valles más suaves. Este tipo de inversores son los utilizados para equipos y aparatos más sensibles, por ejemplo aparatos electrónicos de hospital.
Principales usos y aplicaciones
La mayoría de baterías, como las de un coche o de un molino eólico y la mayoría de fuentes de energías renovables, producen corriente continua, mientras que la mayoría de aparatos eléctricos funcionan con corriente alterna.
Por eso, el principal uso de los inversores es para hacer transformar la energía eléctrica continua en corriente alterna para poder conectar aparatos y dispositivos eléctricos.
Los inversores de voltaje más básicos consisten en un dispositivo pequeño que se puede conectar directamente a las salida de corriente continua del coche o a la entrada del mechero (como el de la imagen superior). Con este inversor es suficiente para hacer funcionar un ordenador portátil, un DVD portátil, cargar teléfonos móviles y aparatos similares.
Todos se pueden utilizar ininterrumpidamente mientras el vehículo está en marcha si bien puede no durar más de media hora con el motor del vehículo parado. También se pueden encontrar inversores que se conectan directamente a la batería a través de cables.
Otros inversores más grandes se utilizan para convertir la energía eléctrica generada por molinos de viento o por placas fotovoltaicas en corriente alterna para que pueda ser suministrada a los hogares a través de la red eléctrica general.
Seguridad
Los inversores de voltaje a nivel doméstico se emplean generalmente para ser conectados a baterías, por ejemplo la batería del coche, y así poder conectar aparatos de uso doméstico como ordenadores, cargadores de móviles, etc. Hay que tener en cuenta algunas precauciones:
- Si se tiene conectado un inversor a la batería de un coche u otro vehículo se debería arrancar el motor cada 15 o 20 minutos para evitar que la batería se descargue al completo. Pero nunca lo hagas dentro del garaje sin ventilación!!!!!
- Conecta el inversor sólo si la batería está en buenas condiciones y cargada. Si la batería tiene poca carga y el vehículo está parado, podría vaciarse al completo en poco tiempo y dejar el coche inoperativo.
- Sí se utiliza el inversor mientras el coche está en funcionamiento no debería haber ningún problema ya que el funcionamiento del motor va suministrando nueva energía a la batería y esta al inversor.
Otras precauciones que deberías tener en cuenta:
- Lee y sigue siempre las instrucciones del fabricante del inversor, sobre todo en lo que se refiere a la potencia y capacidad de la batería dónde se va a conectar. Un uso inapropiado puede tener un desenlace fatal.
- Utiliza siempre un inversor de capacidad adecuada para el uso que le vas a dar. Si conectas demasiada potencia a la salida DC del coche puedes sobrecalentar la conexión y llegar a producir fuego.
- Mantén siempre bien ventilado el inversor para prevenir su sobrecalentamiento.