La ganadería se puede definir como la ciencia del cuidado y cría de animales domesticables para su uso con diversos fines, especialmente agricultura, obtención de productos derivados (alimentos, pieles, etc), para la investigación científica o como animales de compañía.
La ganadería abarca campos tan diversos que en muchas ocasiones se solapan con otras disciplinas, un ejemplo claro son la agricultura o la veterinaria, sectores muy interconectados con la ganadería.
La ganadería está extendida por todo el planeta y mucha gente diferente se dedica a la ganadería como granjeros, agricultores, ganaderos, pastores, y todo aquel que se dedique a la cría y cuidado de grupos de animales domesticables
Algunos autores definen la ganadería como una actividad económica con fines productivos, si bien no tiene por qué necesariamente ser una actividad económica.
Índice de contenido
La agricultura y su relación con la ganadería
La agricultura ha sido practicada por la humanidad desde hace miles de años. Desde etapas tempranas la agricultura se extendió a la cría de animales como fuente de alimento (carne, leche, huevos) y otros productos (pieles de abrigo por ejemplo).
Este paso tuvo su desarrollo más pronunciado durante el Neolítico. El hombre fue ganando conocimiento en las especies animales domesticables y aquellas que mejor podían ser cuidadas para obtener buen rendimiento de los productos que necesitaba.
Así, los humanos comenzaron a cuidar animales alimentándolos, protegiéndolos de depredadores, ayudando en los partos así como previniendo y curando enfermedades.
Las prácticas de ganadería involucradas de forma natural en el cuidado de animales se han ido perdiendo con la industrialización. Si antes era natural proveer de pasto fresco a las ovejas llevando directamente al rebaño al campo a comer (pastoreo), o llevando el pasto fresco a las cuadras, hoy en día en las granjas industrializadas se les alimenta con piensos y alimentación artificial.
Las prácticas de ganadería tradicional aún siguen vivas en zonas rurales, especialmente en países menos «desarrollados». En países desarrollados existen programas para enseñar a los niños algunas de estas prácticas de ganadería que se están perdiendo.
También existen programas de protección de la ganadería tradicional, especialmente en la creciente ganadería ecológica y en muchas denominaciones de origen protegidas que requieren unas formas de vida del animal determinadas.
La selección del ganado
A medida que los animales de granja se fueron domesticando se fueron desarrollando técnicas de cría que hacía posible mantener o desarrollar determinadas características en los animales a lo largo de varias generaciones. Estas características pueden ser muy diferentes, desde un temperamento dócil en caballos a una alta producción de leche en las vacas pasando por habilidades de rastreo en perros.
La idea es similar a la teoría de selección natural de Darwin pero dirigida. Al observar características deseadas en algunos animales, se propicia su apareamiento para ir teniendo crías con mayores posibilidades de tener las características que tenían sus progenitores. Es lo que se conoce como apareamiento selectivo. Estas técnicas de selección genética hoy en día están mucho más avanzadas debido a los conocimientos en genética y métodos como la inseminación artificial aplicados al ganado.
La ingeniería genética aplicada a ganado es un área de desarrollo con un alto crecimiento. Permite la creación de animales con determinadas características mediante la transferencia de material genético de forma mucho más rápida y eficiente que con el apareamiento selectivo. Con estas técnicas se abren también otras muchas posibilidades, no sólo producir más carne o más leche.
Por ejemplo, hoy en día se utilizan animales transgénicos para la producción de algunos medicamentos, como insulina y hormona el crecimiento, o se introducen genes en vacas para que produzcan leche rica en algunas proteínas importantes para el ser humano.
El trabajo en ganadería
La carrera profesional de un ganadero en la actualidad puede tener vertientes tan diferentes como la de seguir con la ganadería familiar o seguir un plan de estudios académicos en temas muy específicos. Incluso puede significar estudios de postgrado.
Muchas universidades ofrecen grados y postgrados relacionados con la ganadería aunque los que adquieren títulos de grado en esta materia suelen estar más interesados en la especialización en algún campo concreto como puede ser medicina veterinaria, nutrición animal o la administración de empresas del sector.
Aquellos que se especializan en algún campo de la ganadería dedican su trabajo a la solución y tratamiento de determinados problemas. Por ejemplo, prevención de mastitis en vacas o la obtención de un alimento completo para cerdos. A medida que las granjas se van industrializando se va requiriendo personal más especializado y preparado para realizar tareas concretas, por ejemplo el uso de la última tecnología en el ordeñado de vacas.
La ganadería es también utilizada hoy en día para la cría de animales destinados a la investigación científica. Áreas como la investigación médica representan uno de los principales usos de la ganadería hoy en día.
Ensayos de nuevos fármacos o pruebas de seguridad de productos químicos suelen requerir grandes grupos de animales de la misma especie y criados en las mismas condiciones para que los resultados obtenidos en varios grupos sean comparables y reproducibles.
Los animales utilizados en investigación suelen requerir unas condiciones de vida muy controladas regulando factores como la temperatura, ventilación, iluminación, comida y agua. Para la cría de estos animales se requiere el conocimiento en profundidad de las necesidades de las especias utilizadas.
El bienestar animal y prácticas controvertidas
El sistema económico actual pone énfasis en una mayor producción y menores costes de producción y ha llevado a prácticas cuánto menos controvertidas tanto en ganadería como en agricultura.
Por ejemplo, se han buscado formas para reducir al máximo el espacio requerido en una granja para cada animal o se utilizan manipulaciones genéticas para obtener animales que proporcionen una mayor producción. Incluso se utilizan drogas para este fin. El uso de las hormonas para aumentar la producción de leche en las vacas es tan sólo un ejemplo.
Actualmente cada vez es mayor la población que demanda una producción ganadera más sostenible que asegure el bienestar del animal. Además, muchos expertos creen que el estilo de ganadería industrial actual introduce sustancias potencialmente tóxicas en el animal que luego pasan al cuerpo humano.
Así, se están poniendo en funcionamiento cada vez más ganaderías dónde el aumento de producción siempre va asociado a un cuidado humano del animal mucho menos mecanizado así como ganadería de «animales felices» que pastan en semi-libertad y se alimentan de forma natural sin el uso de ningún tipo de hormonas ni fármacos destinados al aumento de producción.