Cuándo se habla de procariotas, generalmente nos referimos a una estructura celular sin núcleo en la que el material genético esta disperso en el citoplasma. Los organismos constituidos por este tipo de células se incluyen en el imperio Prokaryota, un rango taxonómico de nivel superior que se divide en los dominios Archaea y Bacteria.
Todos los organismos procariotas son unicelulares pero muchos pueden forman grandes colonias y comunidades agregadas. Una de las pocas excepciones son la mixobacterias (orden Myxococcales), un grupo de bacterias que poseen el mayor genoma bacteriano conocido, compuesto por unos 12.5 millones de nucleótidos, y que tienen etapas en su ciclo vital que algunos autores consideran pluricelulares. También hay autores que describen algunas especies de bacterias magnetotácticas como obligatoriamente pluricelulares.
Por otro lado, los organismos eucariotas están constituidos por células que presentan un núcleo en el que se almacena el material genético. Estos organismos se incluyen en el imperio Eukaryota y actualmente se cree que proceden de organismos procariotas a través de un proceso evolutivo de endosimbiósis.
Dentro de los eucariotas encontramos cuatro grandes reinos: Animalia (animales), Plantae (plantas), Fungi (hongos) y Protista (protozoos). Todos son organismos pluricelulares con excepción de los protozoos y de las levaduras (un tipo de hongos).
Los protozoos son grupo taxonómico altamente parafilético de organismos eucariotas que son mayoritariamente unicelulares, aunque también contienen algunos organismos pluricelulares, por ejemplo las llamadas algas pardas. Entre los protozoos unicelulares más conocidos podríamos citar a los paramecios, al plasmodium o las amebas.
Las levaduras se definen como hongos microscópicos unicelulares. De forma estricta, las levaduras «verdaderas» sólo se encuentran en la división Ascomycota, que son unicelulares durante todo su ciclo vital. Pero el término levadura se ha extendido, sobre todo en microbiología, a todos los hongos en los que la fase unicelular predomina en el ciclo vital, por ejemplo la división Basidiomycota.
Por tanto, se puede afirmar que existen organismos eucariotas unicelulares y que abundan en la naturaleza.