El moco y flemas de color naranja no es un síntoma muy común y suele estar relacionado con una infección grave.
El moco naranja que sale de la boca al toser o por la nariz podría estar causado por neumonía o una infección seria en los senos nasales. Ocasionalmente, algunas infecciones vaginales también pueden producir mucosidad anaranjada si no se tratan durante un largo período de tiempo.
La causa más común de moco naranja es la neumonía, una infección en los pulmones. Puede causar dificultades para respirar, sibilaciones y tos severa expectorante.
Al comienzo el moco es amarillento, en ocasiones marrón. Puede ir también acompañado de sangre que le da color. El moco de color naranja en la neumonía ocurre cuándo no ha sido tratada y se ha desarrollado durante un cierto tiempo estando un estadío grave.
El moco vaginal de color naranja indica una vaginosis bacteriana severa. Esta infección puede estar causada por bacterias naturalmente presentes en la vagina.
Aunque las vaginosis son generalmente fáciles de tratar, las infecciones severas pueden presentar recaídas frecuentes y ser más difíciles de tratar. Las infecciones vaginales pueden causar picor, quemazón, irritación vulvar y mucosidad no transparente y con un fuerte olor.
La mayoría de infecciones no se desarrollan lo suficiente para llegar a producir moco naranja pues suelen tratarse antes. Se recomienda siempre acudir al médico ante los primeros síntomas de infección para que pueda comenzar el tratamiento más adecuado lo antes posible.
Los antibióticos son los medicamentos más comunes para tratar las infecciones pero nunca deben tomarse sin que haya sido prescrito por un médico, ya que el tipo de antibiótico dependerá de la infección y, además, pueden causar efectos secundarios indeseables.
Si ves moco naranja, antes de dar por hecho que hay una infección severa, debes tener en cuenta algunas consideraciones. El moco viene de la garganta (proveniente de tractos respiratorios inferiores) o de la nariz y puede estar coloreado por algunas comidas o bebidas.
Por ejemplo, aceites, salsas de tomates, bebidas carbonatadas y otros productos pueden teñir temporalmente el moco de las áreas nasales y de la garganta.
La sangre también puede teñir el moco y darle un color anaranjado en infecciones menores ya que el moco puede ser amarillo y con la sangre volverse naranja.
Forúnculos y otras lesiones de la piel también puede excretar un líquido de color naranja, marrón o rojo. Lo más frecuente es que sea grasa con mal olor. Esta excreción suele estar producida por células sanguíneas que se acumulan en la zona para combatir la infección.
Algunas veces esta sustancia se mezcla con la pus del forúnculo y tiene un aspecto más denso pero no es moco. Toda sustancia proveniente de un absceso o herida debe considerarse altamente contagioso.