
La macroevolución y la microevolución son dos conceptos relativos a procesos de la evolución biológica. La macroevolución se refiere a cambios evolutivos observables en largos períodos de tiempo y que pueden dar lugar a la aparición de nuevas especies. Por su parte, el concepto de microevolución se refiere a cambios pequeños y progresivos.
Actualmente la corriente más aceptada es que la macroevolución es un cúmulo de cambios microevolutivos y que no hay diferencia real entre ambos.
Índice de contenido
Microevolución
Los cambios evolutivos que se producen a un nivel igual o inferior al de especie se clasifican como cambios microevolutivos. Desde la perspectiva de la genética de poblaciones, la microevolución es el cambio en la frecuencia alélica de una población perceptible en unas pocas generaciones.
La mayor parte de estos cambios se producen por:
- Mutaciones: cambios en el genotipo de uno o más individuos que se transmiten a la descendencia
- Selección natural: se define como la reproducción diferencial de los genotipos de una población biológica. Básicamente consiste en la mejor reproducción de unos individuos respecto a otros gracias a un determinado genotipo que les hace estar mejor adaptados para las condiciones ambientales en las que viven.
- Flujo genético o migración: se traspasan genes entre distintas poblaciones de una misma especie.
- Deriva genética: efecto del azar sobre la reproducción y transmisión genética.
Los cambios microevolutivos también se pueden producir por selección y manipulación artificial por el ser humano. Por ejemplo, el cruce y selección de semillas para el cultivo altera la frecuencia alélica y produce cambios microevolutivos.
Es muy importante destacar la diferencia más importante: los cambios microevolutivos, al contrario que los cambios macroevolutivos, no darían lugar a nuevas especies.
Macroevolución
La macroevolución se refiere a cambios evolutivos a gran escala que rompen la barrera de las especies y pueden dar lugar a especies nuevas e incluso afectar a grupos taxonómicos superiores (géneros, familias, etc).
El concepto de la macroevolución apareció a finales de los años 1930 de la mano de Theodosius Dobzhansky, biólogo evolutivo considerado como el padre de la síntesis evolutiva moderna o neodarwinismo.
No obstante, Dobzhansky terminó afirmando que los procesos que dan lugar a la macroevolución son los mismos que los que dan lugar a microevolución: mutación, selección natural, migración y deriva genética, siendo la única diferencia el tiempo y la escala en la que se producen y observan.
Diferencia y controversia
Dentro de la teoría de evolución biológica más aceptada hoy en día, la síntesis evolutiva moderna o neodarwinismo, existen dos corrientes de pensamiento:
- Naturalismo: acepta la macroevolución.
- Ultradarwinismo: solo acepta la existencia de procesos microevolutivos.
Como se mencionó anteriormente, el propio Dobzhansky, quien acuñó el término de macroevolución por primera vez, terminó haciendo ambos conceptos equivalentes, aunque actualmente se sigue debatiendo si existen o no fenómenos macroevolutivos que puedan estar fuera de la genética de poblaciones clásica.
Este agujero ha sido apropiado por los creacionistas, partidarios de una creación sobrenatural o divina de las especies. Los creacionistas aceptan la microevolución, que es claramente observable incluso en el rango de tiempo de una vida humana, pero no aceptan la macroevolución como origen de las especies. Se basan en la imposibilidad de observación de la macroevolución y en el «acto de fe» que supone su aceptación.
¿Existe diferencia real?
Actualmente, la existencia de la macroevolución es ampliamente aceptada por la mayor parte de la comunidad científica. También es ampliamente aceptado que no hay una diferencia real entre macroevolución y microevolución más allá de la escala a la que se producen.
En la mayoría de teorías actuales sobre la evolución, la macroevolución es simplemente un cúmulo de cambios microevolutivos a lo largo del tiempo hasta que dan lugar a la aparición de nuevas especies.
Muchos científicos, no obstante, intentan evitar el uso de estos términos argumentando que han sido cooptados por los creacionistas en su propio beneficio, que no representan una teoría evolutiva como tal y que al fin y al cabo son lo mismo y no se deben distinguir.